Servomyces es una cepa de levadura de cerveza enriquecida de manera natural. Su finalidad es utilizarla como nutriente biológico de la levadura.
El procedimiento de propagación y secado de Servomyces ha sido específicamente diseñado para acumular un determinado espectro de minerales y oligoelementos que resultan esenciales o limitantes durante la fermentación alcohólica.
¿Qué es Servomyces?
Servomyces es una levadura de nutrientes. En concreto es una de las más destacados en el mundo de la elaboración de cerveza.
Es decir es un activo, en concreto levadura Saccharomyces cerevisiae enriquecida de manera natural con zinc. En concreto contiene entre 50000 y 60000 ppm de zinc dentro de su estructura celular.
Se trata de una sustancia biológica, desarrollada sin químicos ni aditivos.
Una de sus cualidades más destacadas es que mejora la capacidad de la levadura para incorporar los nutrientes esenciales.
Su nombre, Servomyces, deriva del hecho de que la levadura activa se añade al hervido como levadura de sacrificio portadora de zinc para servir a la levadura de fermentación. Esta explicación tal vez tenga más sentido en inglés, en castellano pues bueno, ahí queda la anécdota.
Beneficios
Los minerales cuando se incorporan en un tejido vivo, como el caso de Servomyces, son más eficaces que cuando se presentan en forma de sal.
Así pues Servomyces presenta una mejor biodisponibilidad de los minerales, lo que es un factor muy importante en la nutrición de la levadura.
El uso de Servomyces mejora el proceso de fermentación en general. En concreto se pueden citar las siguientes ventajas:
- Reduce el tiempo de fermentación
- Mejora la sedimentación de la levadura
- Estimula la absorción de maltosa y maltotriosa, según la cepa de levadura, lo que redunda en un mayor rendimiento, ergo más alcohol
- Estimula la síntesis de proteínas y el crecimiento de la levadura, lo que conlleva una mayor producción de biomasa durante la propagación
- Elimina las notas fuertes de azufre y produce una cerveza más suave y equilibrada
¿En qué casos es recomendable usar Servomyces?
El uso de Servomyces es altamente recomendable. Puedes considerarlo como un salvavidas para tu levadura y asegurarte de que ésta atenúe tanto como esperas.
Dado que el zinc es necesario como cofactor enzimático en el último paso de la producción de alcohol es un producto especialmente recomendable para las fermentaciones de alta gravedad.
¿Cómo se usa Servomyces?
En el caso de elaboración de cerveza, en concreto de cara a la fermentación, se necesita 1 g de Servomyces por cada 100 litros de mosto.
Si el propósito es cultivar levadura se recomiendan 2 g de Servomyces por cada 100 litros de mosto.
¿Es importante la cantidad?
¡Importantísimo!
En ningún caso debes echarlo a ojo. Considera que si haces el típico lote de homebrewer de 20 litros tan sólo has de añadir 0,2 g de Servomyces.
Con cantidades tan pequeñas es fácil echar 1 g, por ejemplo, lo que resulta una dosis 5 veces mayor.
Así que no escatimes y pésalo. Para ello necesitarás una báscula de precisión. No son caras y te lo ahorrarás en polvos y disgustos.
- Esta Báscula de Bolsillo tiene una capacidad máxima de 16 oz / 500 g con una división de hasta 0,001oz / 0,01 g, para garantizar una experiencia de pesaje precisa.
¿Cuándo incorporar Servomyces?
Los ensayos han demostrado el mejor rendimiento incorporando Servomyces al mosto diez minutos antes de acabar el hervido.
La finalidad de añadirlo al final del hervido es la de inactivar la levadura mientras se mantiene el zinc en el tejido celular. Esta es la clave por la que el mineral es más biodisponible que una simple adición de zinc.
Propiedades microbiológicas
Se trata de una levadura de alta fermentación clasificada como Saccharomyces cerevisiae.
En el análisis de un gramo típico de Servomyces encontramos:
- Porcentaje de sólidos: 93- 95%
- Zinc: 50.000 – 60.000 ppm
- Levaduras salvajes <103 (método de la lisina)
- Bacterias <105 (0,01% de la levadura)
- Moho negativo
- Levadura de cerveza inactiva
Cabe destacar que no contiene Organismos Genéticamente Modificados (OGM).
